Uno de los mejores personajes de Lucifer solo funciona si ignoras una dura realidad sobre su historia


Dra. Linda Martin en Lucifer es uno de los personajes humanos más entrañables y entrañables del programa, pero su papel está envuelto en una contradicción evidente. Como terapeuta de los seres celestiales que navegan por las emociones humanas, Linda se convierte en una voz confiable de razón, alivio cómico y ancla emocional para muchos de los momentos más dramáticos del programa. Sin embargo, cuando se analiza su conducta profesional real, es difícil pasar por alto cuán lejos cae de los estándares de un terapeuta competente.

Lucifer Se centra en el propio diablo que sale del infierno y hace un hogar en Los Ángeles, donde posee un club nocturno y trabaja como consultor civil con el LAPD. Mientras que gran parte de la narración se centra en su Relación con la detective Chloe DeckerLa Dra. Linda Martin (Rachael Harris) juega un papel clave para ayudar a Lucifer a procesar sus luchas internas. Aún así, la escritura a menudo pasa sobre lo terrible que es en su trabajo diario. Al combinar su vida profesional con enredos personales, la historia de Linda destaca tanto un arco de personajes increíbles como un punto ciego moral deslumbrante.

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Linda Martin es uno de los mejores personajes de Lucifer, pero solo si ignoras que es una mala terapeuta

Ella es cálida, ingeniosa y tremendamente generalizada, y eso es exactamente por qué los fanáticos la aman

Linda Martin llorando en la temporada 4 de Lucifer

Linda Martin, terapeuta de Lucifer, se convirtió en una favorito de los fanáticos Lucifer personaje casi de inmediato. Su ingenio rápido, su actitud intrépida y su disposición a comprometerse con las travesuras de Lucifer la convirtieron en un soplo de aire fresco en medio de los temas más oscuros del programa. Ya sea su humor seco mientras asesora al demonio literal o sus momentos vulnerables de introspección, Linda es sin duda uno de los linchpins emocionales de Lucifer. La química que comparte con el resto del elenco, particularmente Tom Ellis (Lucifer) y Rachael Harris, hace que cada escena sea convincente y entretenida.

Esta tensión hace de Linda un estudio interesante en la disonancia cognitiva, donde los espectadores la animan mientras se repiten simultáneamente la dura verdad de que simplemente no es buena en su trabajo real.

Sin embargo, el atractivo de Linda no proviene de su experiencia profesional, en todo caso, viene a pesar de eso. Su capacidad para humanizar a los seres celestiales como Lucifer y Amenadiel le da un fuerte propósito narrativo, lo que permite a los escritores explorar dilemas filosóficos de manera accesible. Su viaje personal en Luciferparticularmente en la aceptación de la existencia de seres divinos y navegar por la maternidad en circunstancias imposiblemente complicadas, agrega una profundidad emocional que le impide ser un “tropo terapeuta” unidimensional.

Sin embargo, esta misma ventaja narrativa es también uno de sus mayores defectos. Para comprar el papel de Linda de todo corazón, la audiencia debe pasar por alto innumerables violaciones éticas. Muchos de sus mejores momentos, como cruzar líneas personales y profesionales, son cosas que le despojarían a cualquier terapeuta de su licencia en la vida real. En LuciferEl universo elevado, se traduce en un crecimiento entrañable del personaje. En realidad, sería negligente. Esta tensión hace de Linda un estudio interesante en la disonancia cognitiva, donde los espectadores la animan mientras se repiten simultáneamente la dura verdad de que simplemente no es buena en su trabajo real.

Por qué la Dra. Linda sería un terrible terapeuta en la vida real

Desde las líneas de cruce hasta la ruptura de la confianza, las sesiones de terapia de Linda nunca volarían fuera de la televisión

Despojar el caos celestial de Lucifery la ética profesional de la Dra. Linda Martin se crumble. En un contexto fundamentado, Linda se consideraría un estudio de caso sobre cómo no realizar la terapia. Su historia de los límites de cruce comienza casi de inmediato, con su participación romántica con Lucifer. Aunque su relación cambia a uno profesional, el enredo inicial complica para siempre la dinámica. Participar en cualquier forma de intimidad con un cliente es una de las violaciones éticas más evidentes en la terapia, erosionando la confianza y la objetividad requeridas para un tratamiento efectivo.

Se espera que los terapeutas mantengan la neutralidad y eviten enredos que puedan nublar el juicio, sin embargo, Linda se sumerge de cabeza en relaciones con los amigos (y enemigos) de Lucifer sin dudarlo.

Como el giro lleno Lucifer Continúa, la luz límite de Linda también se extiende más allá de Lucifer. Ella se vuelve profundamente integrada en su círculo social, aconsejando a Chloe, Maze, Amenadiel e incluso influyendo indirectamente en sus decisiones. Cada una de estas interacciones presenta un conflicto de intereses. Se espera que los terapeutas mantengan la neutralidad y eviten enredos que puedan nublar el juicio, sin embargo, Linda se sumerge de cabeza en relaciones con los amigos (y enemigos) de Lucifer sin dudarlo.

Su falta de profesionalismo también se muestra en su impulso de explotar sus ideas terapéuticas para obtener ganancias personales. Escribir un libro sobre Lucifer sin su consentimiento explícito es una violación asombrosa de la confidencialidad. Incluso si el programa pasa por alto esto con humor, destaca la voluntad de priorizar sus ambiciones sobre sus obligaciones éticas.

Consejo no profesional en múltiples puntos en Lucifer Más persiste en la credibilidad del Dr. Linda como terapeuta. Sugeriendo que Lucifer revele su verdadera naturaleza a Chloe, a pesar de las ramificaciones emocionales, queda fuera del papel terapéutico. En lugar de guiar a Lucifer a llegar a conclusiones de forma independiente, Linda a menudo lo empuja hacia acciones que sirven a su conveniencia narrativa más que su salud mental.

Mientras defiende la autoconciencia y se enfrenta a los miedos, la Dra. Linda evita habitualmente sus propias dificultades emocionales, como su complicado romance con Amenadiel y el secreto alrededor de su hijo.

La hipocresía también se aunde en el arco de Linda. Mientras defiende la autoconciencia y se enfrenta a los miedos, la Dra. Linda evita habitualmente sus propias dificultades emocionales, como su complicado romance con Amenadiel y el secreto alrededor de su hijo. El apoyo inconsistente, como presionar a Lucifer en un momento y desalentarlo al siguiente, se suma a la disonancia entre Linda el personaje y Linda el terapeuta. Su desviación temporal de ayudar a Lucifer después de descubrir su verdadera forma es casi un abandono literal, un pecado profesional que devastaría a un cliente.

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En la vida real, el enfoque de Linda para la terapia en Lucifer No solo estaría mal visto; Probablemente causaría daño. Sus acciones reflejan a un terapeuta más preocupado por las conexiones y historias personales que el marco ético que garantiza la seguridad y la confianza del cliente.

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A pesar de su lista de pasos en falso profesionales, hay una razón por la cual los fanáticos continúan abrazando a la Dra. Linda. Después LuciferEl clímax de la temporada 2Cuando Lucifer finalmente revela su verdadera forma demoníaca a Linda, su personaje sufre una transformación crucial que suaviza gran parte de las críticas. Frente a realidades divinas e infernales literal, Linda se encuentra en un territorio desconocido donde la ética de los libros de texto ya no se aplica. Trabajar con el demonio literal y su familia celestial la empuja más allá de los límites de cualquier escenario terapéutico “normal”.

Linda no es solo una terapeuta que intenta ayudar; Es una persona normal de repente que se trata de dioses, demonios y apuestas cósmicas. El latigazo emocional es intenso, y es difícil culparla por vacilar.

Las reacciones de la Dra. Linda después de la revelación están lejos de ser perfectas, pero también son algo comprensibles. Ella se distanciaba de Lucifer, una elección que puede verse como la autoconservación y la negligencia. Pero esta respuesta humana cruda a una situación insondable agrega capas a su personaje. Linda no es solo una terapeuta que intenta ayudar; Es una persona normal de repente que se trata de dioses, demonios y apuestas cósmicas. El latigazo emocional es intenso, y es difícil culparla por vacilar.

Este pivote permite Lucifer espectadores para recalibrar sus expectativas de la conducta profesional de Linda. Linda Martin en Lucifer Funciones en un mundo donde las reglas típicas no se mantienen. Su consejo defectuoso y sus contratiempos relacionales, aunque no profesionales, de repente, parecen menos atroces en comparación con la tarea imposible de aconsejar a los seres celestiales con problemas de papá y equipaje apocalíptico. Se convierte en una brújula más moral en un universo inestable, incluso si no siempre lo hace bien.

Su decisión de quedarse, desafiar sus miedos y continuar proporcionando orientación, por defecto que sea, hace que Linda sea comprensiva.

Su decisión de quedarse, desafiar sus miedos y continuar proporcionando orientación, por defecto que sea, hace que Linda sea comprensiva. La dinámica entre Linda y sus clientes sobrenaturales se convierte en un intercambio mutuo, donde aprende tanto de ellos como de ella. Esa vulnerabilidad, combinada con su implacable deseo de ayudar a pesar de estar en la cabeza, gana su redención a los ojos de muchos fanáticos.

En última instancia, el personaje de Linda en Lucifer Funciona mejor cuando se ve a través de la lente del perdón. Ella no es una buena terapeuta, pero es una gran humana que trata con circunstancias extraordinarias, y eso cuenta para algo.


Póster de Lucifer

Lucifer

6/10

Fecha de lanzamiento

2016-2021-00-00

Showrunner

Joe Henderson

Directores

Joe Henderson

Escritores

Tom Kapinos






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